Haz de tu cocina un lugar especial en el que preparar esta receta de Macarons de manzana. Convierte la hora del postre en el broche de oro de tus comidas y disfruta de un momento de lo más dulce.

Preparación

  1. 30 minutos (más reposo)

Cocción

  1. 10-12 minutos

Raciones

  1. 30 macarons

Ingredientes

Para las conchas

  1. 200 g de azúcar glas
  2. 110 g de almendra molida
  3. 90 g de clara de huevo
  4. 30 g de azúcar normal
  5. 1 pizca de colorante verde manzana

Para la crema de manzana

  1. 150 g de mantequilla a temperatura ambiente
  2. 150 de queso de untar
  3. 150 g de azúcar glas
  4. 1 cucharadita de concentrado de pasta de manzana (25 g)

Preparación

Pesar y tamizar el azúcar glas y la almendra. Unir la almendra y el azúcar tamizados en un bol amplio y reservar. Pesar las claras. Para que monten mejor, deben estar a temperatura ambiente, por lo que es recomendable sacarlas un rato antes del frigorífico.

Con un batidor de varillas, comenzar a montar las claras hasta que se forme una espuma. Agregar suavemente el azúcar normal y seguir montando con el batidor de varillas a máxima velocidad, hasta que se forme un merengue con picos firmes.

Pasar nuevamente la mezcla de azúcar glas y almendra por el tamiz mientras que la vamos dejando caer en forma de lluvia sobre las claras que hemos montado previamente. Mezclar suavemente con ayuda de una espátula y a medio mezclar, añadir el colorante.

Preparar una manga pastelera con boquilla redonda, dependiendo del tamaño que vayamos a hacer los macarons. Con la manga pastelera perpendicular a la bandeja de horno, previamente forrada con papel vegetal, ir depositando pequeñas cantidades de masa, hasta conseguir círculos de aproximadamente 2,5 – 3 cm. Para hacer un círculo, apuntar con la punta de la boquilla al centro del círculo, con la manga perpendicular, y sin movernos del sitio, presionar hasta rellenar el círculo. De esta manera salen perfectamente redondos. Probablemente se formará un pequeño pico, que desaparecerá en unos segundos. Si no es así, es que la masa está demasiado espesa y hay que mezclarla un poco más. Si queremos darles forma de manzana, basta con poner una plantilla debajo del papel de hornear para que sirva de guía. Recordar retirar la plantilla antes de hornear.

Cuando tengamos todos los macarons sobre la bandeja, dejarlos reposar al menos una hora para que se forme el “pie”. De esta manera, la capa superior se secará y se formará una “costra” y al introducirlos en el horno, el aire del merengue solo puede escapar hacia abajo, formándose el pie tan característico de estos pastelitos. Antes de hornear, para saber si están secos y listos, tocar uno por encima. Debe notarse ligeramente seco, y no debe quedarse pegado al dedo.

Precalentar el horno a 150º C. Introducir la bandeja en el horno. Hornear unos 10-12 minutos para este tamaño (2,5 – 3 cm de diámetro). Deben quedar secos por fuera, y ligeramente blandos por dentro. Retirar del horno y dejar enfriar sobre la misma bandeja donde los hemos horneado. Una vez fríos, pero sin esperar demasiado, despegarlos con cuidado de la hoja de papel vegetal.

Para el relleno, batir todos los ingredientes con el batidor de varillas a máxima velocidad, hasta que la mezcla esté blanquecina y esponjosa. Con una cucharilla, o una manga pastelera, depositar una cantidad generosa en el centro de cada macaron y presionar con la otra tapa para que se distribuya el relleno hasta el borde.

Es posible conservar varios días los macarons rellenos en un recipiente hermético en el frigorífico, retirándolos unos minutos antes de consumirlos.